Manuscrito medieval de la traducción del Timeo de Platón a partir de la versión comentada de Calcidio. |
El sustrato material y la
existencia de la forma
El lado débil de cualquier idealismo es su filosofía de la
naturaleza. Sobre todo si pretende ser ciencia de la naturaleza, saber
objetivo. La naturaleza resulta muy poco ideal para quien la conoce de cerca. No me
refiero al conocimiento científico, que cuando es teórico resulta
notablemente ideal (y
aquí el Timeo sigue teniendo algo que decir), sino al
conocimiento directo del campesino, del jornalero, del cazador, del pescador, del
granjero. Ni siquiera hace falta tomarse en serio la Evolución, la lucha de las
especies por la supervivencia, para comprender que la naturaleza es un campo
de batalla de fuerzas ciegas. Como la Natura-Dios de Spinoza, el mundo no parece responder a fines y, en este sentido, no es ni bueno ni malo.